En la entrada de ayer expuse algunas comunidades dedicadas a la educación en la red social emergente Google +. No obstante hoy me gustaría mostrar mi opinión acerca de las comunidades en general incluidas dentro de las propias redes sociales.
Las redes sociales nos ayudan a generar un intercambio muy rápido de información, esta queda almacenada en el servidor y las personas podrán observarla según como tengas configurada tu privacidad.
En el caso de las comunidades ocurre exactamente lo mismo. Según cómo tenga configurada la comunidad el administrador, podrá acceder a la información cualquier persona de la red o sólo las que pertenecen a dicha comunidad.
En principio es bastante útil ya que nos presenta un núcleo de información generado por muchísimos usuarios que les une una misma afición o preocupación. Sin embargo, ¿no tiene la misma utilidad un foro?
Si empleamos una herramienta anterior a las redes sociales como pueden ser los foros o las listas de correo, seguiremos compartiendo la misma información solo que no estaríamos registrados con nuestros datos personales (si no con un seudónimo) y conservaríamos algo más el anonimato.
Las redes sociales son herramientas muy útiles, pero desconfío un poco de ellas. Las empresas que tienen la información que expones (ya sean comentarios o ubicaciones) y la analizan para estudios de mercado (en el mejor de los casos). Gracias a las comunidades se pueden establecer más fácilmente perfiles psicológicos como sociales de las personas que están registradas ahí y la empresa puede utilizar esa información como considere conveniente.
Una medida que no son demasiado efectivas pero que pueden ser útiles sería tener distintos perfiles y seudónimos en estas redes según la información que quieras obtener en ese momento (trabajo, amistades, preferencias...) y, por último, estar muy seguro de lo que expones en ellas para que en un futuro no pueda ser utilizado en tu contra.
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